Nos llega esta fantástica aportación de María.
¡Gracias hermosa!
A mi ritmo
Voy poco a poco, pero noto que algo está
cambiando en mi percepción del Roki hacia los demás; hacia mi misma lo curé;
hacía los demás me cuesta todavía; no sé si iré avanzando pero lo que si sé es que
por lo menos, ahora, atisbo en mi interior una cierta e incipiente predisposición
a compartirlo si fuese preciso, que antes no existía; es que ni me lo
planteaba, es más, lo guardaba como el gran secreto de mi vida, el tabú y era
tal el hermetismo que tenía, que sólo pensar que alguien lo pudiese saber, me
perturbaba el alma.
Hace unos pocos días estuve visitándome en el
cardiólogo e iba acompañada por mi marido; en un momento en que estaba explicando
al doctor los problemas de salud que había tenido a lo largo de mi vida, le comenté
que tenía el Síndrome de Rokitansky....¿qué es eso? me respondió con cara de
extrañeza... y yo, con una tranquilidad que ni me lo explico, le expuse,
delante de mi marido, lo que era el Síndrome. Es la primera vez en mi larga vida, que me enfrento a dar la
explicación a una tercera persona delante de mi marido. Cuando salí de la
consulta le pregunté si había estado nerviosa y si lo había hecho bien. Fue en ese
momento, cuando él me contestó,” lo has hecho muy bien”, cuando se me abrió un
poco más la mente y me encontré feliz de haberlo hecho. Íbamos los dos en la
misma dirección.
No quiero decir con esto que esté dispuesta
a explicarlo a la primera de cambio, pero sí que, como he dicho antes, si fuese
preciso, creo que seré capaz de hacerlo. Para mí es un gran triunfo ya sólo el
pensar que voy a ser capaz.
Y de nuevo os doy las gracias, porque sois
vosotras las que habéis logrado,
con vuestra actitud y vuestra paciencia, que me vaya abriendo, aunque sea poco
a poco.
María
>>> VER TODAS LAS ENTRADAS DEL BLOG
No hay comentarios:
Publicar un comentario